Viernes 9 de febrero de 2007.- La figura esbelta o delgada sólo puede tenerla entre 5 y 10 por ciento de la población que, por razones genéticas y de constitución física, está dentro de ese biotipo, aseguró Abelardo Avila Curiel, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de la Nutrición Salvador Zubirán.
Señaló que el resto de las personas, en particular las adolescentes, que se someten a dietas rigurosas, además de perder peso, también logran reducir su reserva de grasa "normal", lo que las coloca en riesgo de desarrollar diversas enfermedades, como desnutrición, osteoporosis, daños neurológicos o del corazón.
El investigador indicó que quienes han sacrificado su reserva natural de grasa durante un largo periodo son más propensos al sobrepeso y la obesidad, debido al daño ocasionado en su metabolismo, además de que estas personas pueden padecer trastornos psiquiátricos, como anorexia nerviosa y bulimia.
Todos ellos generan un problema de salud pública difícil de controlar, y en su intento por verse esbeltos impulsan intereses económicos muy fuertes, como los negocios de productos para adelgazar.
Las personas están sometidas a una presión social para verse delgadas como las modelos que aparecen en la televisión, independientemente de los métodos que utilicen para lograrlo, señaló.
El especialista en nutrición calificó los procedimientos de liposucción de "bárbaros", porque implican introducir al organismo un solvente de la grasa que se ubica debajo de la piel, pero que genera severos trastornos a la salud.
Miedo a los kilos
Cuestionado sobre la lipofobia (pánico a la obesidad), Aberlardo Avila Curiel explicó que se trata de un trastorno de angustia, que es alentado por presiones familiares y sociales, en los cuales se discrimina a las personas con exceso de peso.
A esta situación se suman los intereses comerciales que han encontrado un nicho de mercado en los jóvenes que se dejan llevar por la "moda" de la delgadez y consumen productos llamados light, jugos o supuestos "alimentos naturales", que en muchas ocasiones son tóxicos.
De acuerdo con una investigación realizada por investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, al menos 63 por ciento de los adolescentes en México padecen obesidad.
El verdadero problema que enfrentan las jovencitas que aspiran a tener una figura esbelta, abundó Avila Curiel, es que sólo 5 o 10 por ciento de la población reúne las condiciones físicas y fisiológicas para lograrlo de manera natural.
Además de la grasa, existen otros factores que condicionan la apariencia física, como la musculatura y el esqueleto, los cuales están vinculados con el ecosistema en que se desarrollan los individuos.
El investigador resaltó la importancia de que las personas, en particular los jóvenes, no pierdan de vista que la única forma de mantener un cuerpo saludable es llevar una dieta equilibrada y realizar actividades físicas durante 40 minutos al día.
La Jornada
