Imprimir
La ciencia de la muerte: Tanatología

Por: Yair Rodríguez González

Los sueños son como muertes cortas, la muerte es un sueño más largo, con esta reflexión amigos lectores deseo que conozcamos juntos la Tanatología, la ciencia de la muerte. De acuerdo a lo que comenta el Dr. Fructuoso Ayala Guerrero, investigador de la Unidad de Investigación y Servicios Psicológicos UAEM, en la antigüedad la muerte era considerada como una especie de sueño.

Entre los mexicanos la muerte tiene un sentido singular. A veces aparece como una arraigada tradición que fija sus profundas tradiciones en el pasado indígena; en otras ocasiones, surge como un escenario donde se mueven y deslizan figuras del recuerdo. Sin embargo, es un hecho que la muerte ha provocado un temor ancestral. El hombre tiene la capacidad de asomarse a sus próximos tiempos. Se inquieta por los hechos del futuro en especial si son inevitables y comprometen íntegra y definitivamente su propia persona, como lo es la muerte.

Actualmente, en nuestra sociedad se ha producido un considerable avance en lo referente a la atención al paciente moribundo, por un lado en lo referente a la terapia del dolor y más específicamente a la farmacología en sí. Pero también, la serie de cuidados atenuantes desarrollados inicialmente en Inglaterra mediados del siglo XX, dio cuenta de la necesidad de brindar una atención compasiva inclinada no sólo a disminuir el sufrimiento físico del paciente sino también a optimizar su calidad de vida, a través del control de los síntomas físicos, emocionales, mentales y sociales.

En este sentido es como nace la Tanatología, una práctica que el Premio Nobel de Medicina Elías Méchnikov bautizó como “la ciencia de la muerte”, convirtiéndose desde entonces en parte de la medicina forense. La palabra Tanatología proviene del griego Thánatos, que en la mitología griega personificaba a la muerte. Este personaje era hijo de Nix (la noche) y hermano de Hypnos (El Dios del sueño). Aunque se lleva a cabo desde tiempos remotos, es hasta que la doctora Elizabeth Kübler Ross abundó en los fenómenos psicológicos experimentados por moribundos y creó clínicas regidas por el lema “ayudar a los enfermos terminales a vivir gratamente, sin dolor y respetando sus exigencias éticas”, cuando se funda formalmente la Tanatología.

Esta ciencia, gira alrededor del enfermo terminal y se basa en las descripciones y observaciones que sobre él se realizan para ofrecer un diagnóstico y, mediante este, determinar las acciones a seguir. La Tanatología distingue la productividad científica y la posición de la sociedad ante la muerte, cuenta con una base interdisciplinaria constituida por la medicina, la enfermería, psicología, asistencia social, justicia y ética, por mencionar algunos.

La Tanatología percibe al hombre como un todo, con sus necesidades y con sus realidades físicas, psicológicas, espirituales, sociales y culturales; contemplando primero al enfermo terminal y luego a quienes le rodean. A su vez, el objetivo principal de la Tanatología es ayudar al hombre a morir con dignidad, plena aceptación y total paz.

Como pudimos ver, adentrarse en este tema implica mucho más que estas breves líneas que han tratado de explicar a grandes rasgos la existencia y evolución de la Tanatología.

Fuente: Hypatia. Morelos