21 de marzo de 2011

La escritora Susanna Tamaro

La película de Roland Joffé inspirada en la figura de san Josemaría, me ha parecido poderosa, bien rodada y dramáticamente muy eficaz.

La decisión de contar la historia recorriendo las vicisitudes que componen las trayectorias opuestas de dos amigos de infancia, resalta la importancia de la libertad que Dios nos ha dado para aumentar el mal que hay en el mundo o disminuirlo.

La película, finalmente, hace justicia a la figura del joven Josemaría. Estoy segura de que esta película puede hacer mucho bien a las nuevas generaciones, huérfanas de figuras para admirar y, ¿por qué no?, también para imitar.

Fuente: es.josemariaescriva.info