Imprimir
Prevén que menores adictos a la televisión creen amigos imaginarios

Explica el director del Servicio Estatal de Salud Mental de la Secretaría de Salud Pública de Sonora que ante la falta de atención de los padres, los menores corren el riesgo de generar una enfermedad mental posterior

Notimex. El Universal. Hermosillo, Sonora Sábado 28 de junio de 2008
El 10 por ciento de los menores sonorenses que están en contacto directo con la televisión corren el riesgo de desarrollar amigos imaginarios, ante la falta de atención de los padres y de una red de apoyo familiar adecuada.

El director del Servicio Estatal de Salud Mental de la Secretaría de Salud Pública (SSP), Félix Higuera Romero, explicó que en caso de persistir ese problema, existe el riesgo de que los niños generen una enfermedad mental posterior.
Los amigos imaginarios es significado de que el menor no ha tenido un desarrollo normal o son señales de problemas mentales severos, por lo que de continuar manifestándose con los años, pueden derivar en problemas de salud, advirtió.

Señaló que este escape emocional se debe a la soledad motivada por negligencia a causa del abandono de los padres para atender sus necesidades personales y que dejan de lado a sus hijos.

La exposición prolongada a la televisión, acotó, también genera en los menores dificultad para socializar, así como escapes emocionales por la exposición a los dibujos animados en televisión con mensajes negativos, además de fomentar el sedentarismo.

Dijo que los amigos imaginarios son normales en los pequeños de tres y cuatro años, cuando inicia la etapa del desenvolvimiento social y del pensamiento mágico, pero a los cinco años mejora su lógica, haciendo una diferenciación entre lo imaginario y lo real.
La creación de compañeros inexistentes, es notable porque el menor sostiene largas conversaciones, juega o ríe con personas que no se ven, creadas por él mismo para hacerle compañía en su soledad, con nombre y personalidad propia, ejemplificó.

Planteó que esta actitud se presenta en raras ocasiones después de los seis años de edad, pero cuando esta conducta persiste, los padres deben buscar ayuda profesional para descartar esquizofrenia de inicio temprano, enfermedad de difícil diagnóstico.
Asimismo, comentó, podría tratarse del Síndrome de Asperger por la dificultad para hacer amigos, interacción ingenua e inapropiada, lenguaje pedante y repetitivo, así como una comunicación verbal pobre.

Recomendó a los padres de familia que hayan detectado estos síntomas en sus hijos acudir al servicio de salud mental, donde se cuenta con programas de intervención para estos padecimientos.

Higuera Romero comentó que el apoyo que ofrecen es ayudar en la educación de los tutores para atender las necesidades elementales a los niños afectados, con estilos de crianza funcionales, y en cómo fomentar las habilidades emocionales, sociales e intelectuales del hijo.

Puntualizó que a través de actividades interactivas se les capacita para prevenir el maltrato y la negligencia, así como fomentar la participación de los menores en actividades sociales fuera de casa, con pequeños de su misma edad.

Recomendó a los padres de familia incrementar el tiempo de calidad que brindan a sus hijos, a través de una buena planeación del tiempo para compartir juegos interactivos o proyectos, el fomento de valores y seguridad personal del niño.