Jerry trabaja diligentemente en su programa “Quickbooks” hasta que su esposa se acuesta. Cuando ella le da las buenas noches y se dirige al dormitorio, él entra en su chat favorito, la sala de conversación individual, y comienza a sentir cómo su excitación va en aumento. Él busca a “Sweet Roll”, una mujer con la que se reunió la noche anterior. Espera encontrarla, pero no se preocupa demasiado, porque sabe que si ella no está allí alguna otra habrá. No le importa realmente quien esté allí, porque sabe que de todas formas logrará encontrar una conversación estimulante. Al cabo de unas horas él se acuesta y permanece despierto mientras escucha como respira su esposa. Intenta no sentir su apetito por el contacto sexual real y fija su mirada en la oscuridad preguntándose qué es lo que está fallando.
Si usted o alguien que usted aprecia muestra señales de adicción cibersexual, le mostraré cómo puede intentar ayudarse o ayudarle. Estas sugerencias se basan en técnicas que se han mostrado útiles con otros procesos adictivos. Si usted no tiene éxito con ellas, inténtelo de nuevo y haga un esfuerzo por hablar cada vez con más personas de los esfuerzos que realiza para superarlo. El apoyo de los demás a la hora de cambiar los modelos adictivos es una de las claves fundamentales para el éxito. Tal y como un experto en adicciones declaró “Estamos tan enfermos como nuestros secretos”.
1. Pregúntese por qué está buscando esta estimulación en línea. ¿Qué hecha de menos en su vida real, cuando está desconectado?. Si tiene una relación estable, ¿hay algo que no pasa en esa relación y que usted necesita que pase?.
2. Reciba una dosis de realidad de un amigo o amigos. Hábleles sobre sus actividades on-line y pregúnteles lo que ellos ven de su vida que quizás explique su problema. A menudo los amigos ven cosas en nosotros que uno mismo no puede ver.
3. Decida qué tipos de websites/chat y grupos de noticias serán aceptables cuando se conecte. Haga un pacto consigo mismo y si viola ese plan, permanezca sin conectarse para nada durante al menos dos semanas.
4. Cuéntele a un amigo su plan de permanecer sin conectarse y pídale que le apoye haciéndole preguntas sobre cómo y cuando está evitando con éxito esos impulsos; que le anime hacia otras actividades en el mundo del cara a cara; y que se centre y le muestre cómo usted está superando muchos de esos impulsos. Evite que ellos se conviertan en sus policías –deben estar para apoyar cada uno de sus pasos positivos y no para hacer su vida miserable si usted resbala.
5. Si hasta ahora usted se ha conectado para encontrarse repetidamente con una persona específica, comuníquele que quiere dejar de mantener esas reuniones.
6. Mientras permanezca desconectado tenga a mano un papel y haga lo siguiente. Anote los pensamientos y sentimientos que tiene sobre la evitación del sexo on-line. Perciba las circunstancias que generan los impulsos para conectarse. Busque nuevas maneras de enriquecer su vida, puesto que ello será un factor clave para el éxito. Inicie una nueva actividad, deporte, pasatiempo, club, o busque apoyo acudiendo a algún tipo de reuniones de grupo.
7. Antes de conectarse para algo que no sean cuestiones de trabajo, decida donde irá y cual será la máxima cantidad de tiempo de ocio que dedicará a estar conectado. Ponga una alarma que le avise cuando se pasa del tiempo establecido.
8. Si encuentra que usted no puede controlarse y dejar de coquetear o cualquier otra conducta de tipo sexual, conéctese exclusivamente para cuestiones laborales (únicamente si es indispensable) y busque la ayuda de un grupo de apoyo on-line y/o de una clase on-line para la adicción sexual en línea. Mientras tanto, puede ir aplicando lo mencionado en el punto 4.
9. Si usted tiene una relación estable, dígale a su pareja lo que le gustaría hacer (no lo que encuentra a faltar) en su relación, e intente hacerlo con el/ella. Fije un momento en que tenga una fecha especial y diga las cosas que ha estado evitando decir, pero asegurándose de recordar las reglas de cortesía y bondad comunes. Ponga énfasis en las cosas que le gustan de su pareja y construya su relación sobre esos aspectos.
10. Si estas fuentes de auto-ayuda no le son útiles, busque la ayuda de un profesional que tenga experiencia en trastornos compulsivos y/o adicciones. Dado que la adicción al cibersexo es una nueva área de tratamiento, le será más fácil encontrar a alguien que tenga experiencia en el tratamiento de otras adicciones; con él podrá conversar libremente acerca de su experiencia.
La Dra. Maheu es escritora, portavoz e investigadora en Cyber-affairs, Cyber-Romance y CyberSexo.
Artículo publicado en Self-Help Magazine.